martes, 11 de noviembre de 2008

La Banca Navidá

Ya en los centros comerciales, en todas las tiendas, incluso en los restaurantes o pequeños negocios, la navidad se hace presente. Aunque falta más de un mes todos presumen con orgullo sus “panzas” de Santa Clos (nahhh la verdad es que México sufre de obesidad)…

La emoción ya no es la misma como cuando éramos niños y esperábamos con ansia un juguete… Yo en lo particular pedía
“Ruedas Calientes”, no, no es una película porno al estilo Rápido y Furioso, sino los cochecitos y pistas, Hot Wheels, pues.

Luego llegó una navidá el
Nintendo… ahora que lo pienso, tal vez eso atrofió mi memoria… Si alguien ha de tener la culpa (como en todo) que sean mis papás por dármelo (jejejje).

Balones y muñecos completaban los regalos que nos daban, y claro la ropa que los papás aprovechaban para
“contar como regalo”. En fin, ahora, para quienes NO tenemos hijos, la navidá nos servirá para comer como cerdos, engordar, hacer propósitos que nunca cumpliremos y para atragantarnos con las uvas…

Como que medio odio la
Navidá… (por cierto en esta temporada cual más aprovecha para enontonarme Rodolfo el Reno...mmmmm...)

2 comentarios:

Anónimo dijo...

YO SI ODIÓ LA NAVIDAD, ENTRE OTRAS COSAS:

- LOS EMBOTELLAMIENTOS.
- LAS AGLOMERACIONES.
- LAS SEÑORAS GORDAS EN LAS TIENDAS.
- LOS FALSOS BUENOS SENTIMIENTOS.
- LOS ABRAZOS.
- LOS "¡FELICIDADES!".
- EL NO SABER QUÉ REGALO COMPRAR.
- EL SENTIMENTALISMO.
- QUE HAGA CALOR EN NAVIDAD, JOÉ!
- LOS PROGRAMAS ESPECIALES DE LAS TELEVISORAS.
- LAS CRUDAS.
- TRABAJAR CUANDO TODOS ESTÁN DE VACACIONES.
- LOS RESÚMENES DE FIN DE AÑO.


Y SEGURAMENTE MUCHAS COSAS MÁS QUE YA SE ME OCURRIRÁN.


GALDINO PÉREZ.

Anónimo dijo...

pero en eso si te ganan carnal recuerda que la superiora es grinch y odia odia odia odia odia la natividad del paisano